Probióticos en el embarazo, parto y lactancia
Durante los últimos años hemos escuchado muchas recomendaciones sobre la importancia del parto vaginal, la lactancia y el cuidado de las madres durante el embarazo. Y hoy vamos a hablar de una de las razones menos conocidas que apoyan la importancia de estas acciones: la dieta microbiótica y el consumo de probióticos.
La importancia de los probióticos
Durante la gestación, el bebe recibe muy pocos microorganismos, es decir, su microbiota es casi inexistente. Es en el momento del parto, cuando las madres inoculan a sus bebés por el canal vaginal, principalmente con lactobacillus. Estos microorganismos constituyen más del 70% de los lactobacillus que tendrá ese ser humano a lo largo de su vida.
En el caso de quienes nacen por cesárea, la inoculación se da por medio de bacterias de la piel de la madre que pasan a las del bebe.
Estudios realizados en Dinamarca, chequearon por un periodo de 15 años a grupos de personas nacidas por parto vaginal y por cesárea y concluyeron que: por un lado, las cepas bacterianos predominantes en cada uno eran diferentes y, por el otro, que quienes habían nacido por canal vaginal tenían un sistema inmune más fuerte, siendo el otro grupo más proclive a desarrollar enfermedades o condiciones como diabetes, celiaquía, asma y enfermedades respiratorias.
A su vez, durante la lactancia el bebe recibe el 40% de las bifidobacterias que poblarán su microbiota.
Tanto los lactobacillus como las bifidobacterias son los dos grandes grupos de bacterias más importantes que constituyen nuestra microbiota y son fundamentales para casi todos los procesos físicos de nuestro cuerpo.
Una madre bien alimentada durante el embarazo, teniendo en cuenta los aspectos claves de la dieta microbiótica, de los cuales siempre hablamos, es vital para la salud de ella y del bebe, sea para prepararse para el nacimiento como para la lactancia.
Entonces ¿qué pasa con los alimentos fermentados?
Muchos de ustedes saben que tienen un poco de alcohol, como el caso del kéfir de agua, la kombucha y el kéfir de leche. Entonces, ¿puede una embarazada o mujer que está amamantando consumir kéfir o alguno de estos fermentos? La respuesta es: depende.
Si el fermento es realizado en forma doméstica, la respuesta es: categóricamente no. En la producción doméstica no es posible controlar o medir la cantidad de alcohol que realizan las levaduras o bacterias que habitan en los gránulos o scobys. En estos casos, el kéfir puede producir hasta un grado alcohólico del 3% y la kombucha del 5%.
Si el fermento es producido de manera controlada y se parten siempre de las mismas cepas, es posible controlar el alcohol. Por ejemplo, el kéfir de leche de Loto es apto, ya que no genera alcohol hasta los 10 días después de su elaboración y su contenido máximo es del 0,5% 10 días después. Agregar esta increíble cantidad de microorganismos vivos es sumamente importante en estas etapas. ¡Por cada gramo de kefir de Loto hay 1 billón de bacterias vivas!
Referencias:
Singh SB, Madan J, Coker M, Hoen A, Baker ER, Karagas MR, Mueller NT. Does birth mode modify associations of maternal pre-pregnancy BMI and gestational weight gain with the infant gut microbiome? Int J Obes (Lond). 2020 Jan;44(1):23-32. doi: 10.1038/s41366-018-0273-0. Epub 2019 Feb 14. PMID: 30765892; PMCID: PMC6694002.
Nagpal R, Tsuji H, Takahashi T, Kawashima K, Nagata S, Nomoto K, Yamashiro Y. Sensitive Quantitative Analysis of the Meconium Bacterial Microbiota in Healthy Term Infants Born Vaginally or by Cesarean Section. Front Microbiol. 2016 Dec 15;7:1997. doi: 10.3389/fmicb.2016.01997. PMID: 28018325; PMCID: PMC5156933.
Milani C, Duranti S, Bottacini F, Casey E, Turroni F, Mahony J, Belzer C, Delgado Palacio S, Arboleya Montes S, Mancabelli L, Lugli GA, Rodriguez JM, Bode L, de Vos W, Gueimonde M, Margolles A, van Sinderen D, Ventura M. The First Microbial Colonizers of the Human Gut: Composition, Activities, and Health Implications of the Infant Gut Microbiota. Microbiol Mol Biol Rev. 2017 Nov 8;81(4):e00036-17. doi: 10.1128/MMBR.00036-17. PMID: 29118049; PMCID: PMC5706746.
precio y como se consume
Buen día!
* El kéfir Griego es suave y cremoso, ideal para comer con cuchara. Puedes consumirlo solo o agregarle frutas o cereales, también usarlo en ensaladas u otras preparaciones frías como postres. Aconsejamos consumir 3 cucharas soperas por día como mínimo. Contiene 315 ml y rinde 3 días, aproximadamente.
* El kéfir untable tiene la consistencia de un queso untable. Es ideal para untar tostadas o acompañar tus picadas. Recomendamos consumir 3 cucharitas de té por día (como medida para untar). Contiene 200 grs y rinde 2 semanas, aproximadamente.
* El Kéfir bebible es un producto líquido, similar a la textura de la leche. Puedes tomarlo solo o incluirlo en licuados (siempre preparaciones frías). Aconsejamos tomar 1/2 a 1 vaso por día. Contiene 720 ml y dependiendo del consumo puede rendir 3 o 5 días.
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